Despedida 1

ya no tengo fuerza para seguir viviendo
mis sueños se desmoronan frente a mis ojos
y yo sigo ahí
inmóvil
tan inútil como siempre

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yo no tengo fuerza para cargar este cuerpo un día mas
mis huesos parecen de cristal y mi piel un papelillo
estoy mas vulnerable que de costumbre
soy apenas un recuerdo de lo que fui
una criatura con mas pasado que futuro
un enfermo terminal
conectado a mil aparatos que no logran reemplazar la vida

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yo no puedo mas con esta náusea
ni con el vértigo
ni con el cansancio
ni mucho menos con estos tres síntomas juntos cada vez que respiro

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sé que la pelona viene por mí
y no le daré ningún trabajo
que me lleve el putas, el diablo o dios
si es que no son la misma cosa
con distinto rabo

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yo no soporto un día mas con esta desazón
con la horrible sensación del que nació para mendigar amor

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ruego a dios a que me mate fulminantemente
y que no pase de esta noche
lo reto a que vuelva a usar su rayo justiciero
y me parta de dos en dos
hasta borrar cualquier rastro de esta historia

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dejo un espacio vacío para nadie
unas letras que nadie lee
y unas palabras que nadie escucha
dejo un pequeño espacio que nadie notará
en poco tiempo lo habrá ocupado el olvido

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no dejo ninguna herencia
solo deudas acumuladas en tantos años irresponsabilidad
dejaré algún corazón roto
pero joven para sanarse
y olvidarme prontamente

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nadie notará mi ausencia
como un murmullo
mi partida será otro “periódico de ayer”
pero nadie tarareará mi coro

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no pido un lugar en la historia
ni un pedazo de memoria
todos mis proyectos inconclusos
se enterrarán conmigo en el olvido

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31 años no fueron suficientes para convencerme:
la vida es un castigo
del que debemos salir voluntariamente

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nunca tuve fuerza para expresar alegría
mis rencores, dudas y laberintos
me impidieron vivir fuera de la angustia

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una vez me pidieron escribir algo bonito
y lo hice sagradamente
vistiéndome decentemente
pagando impuesto
y cortándome el cabello

pero ahora me descamiso el alma
y vuelvo a ver el monstruo que me habita
el cáncer que carcome mis entrañas:
la falta de fe en el mañana

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cuando renuncié a la fé todo parecía ser muy claro:
dios no existe y el hombre es el peor accidente del caos de la evolución
la fe nace en la incapacidad del hombre para explicar los fenómenos de la naturaleza
la vida es solo una sucesión de actos caóticos de las moléculas
no hay alma
no hay vida mas allá de ésta
no hay siquiera una sola realidad para habitar
no hay mundo ni personas que lo sueñen.
no hay mañana y ni siquiera tiempo
el universo se detuvo en la primera explosión
mientras dios retoza su siesta
y sus criaturas preferidas se matan sin cesar.

no hay dios en el cielo
ni cuerpo que lo resista

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me cansé de vivir el día a día como el jornalero
juntando monedas para terminar la semana
me cansé de alquilarme
de venderme barato o caro según la ley del mercado
me cansé de enfrentarme solo conmigo mismo
me cansé de morderme los gritos
de ahorrarme besos
de embolsillarme puñaladas

por eso no me ahorro el grito que me atora:
me odio tanto como al dios que me abandonó.

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me cansé de mí mismo
y de todas mis contradicciones.

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si no ocupara mi tiempo enredándome en estas palabras
seguramente el tedio me llevaría al suicidio