foto: en el puente "Guillermo León Valencia"... hace unos años lo arrasó el río Ariari, aquí la calle queda "mocha", como un abismo hacia el imponenete río... puera ingeniería colombiana o la fuerza de la naturaleza que no se deja. Es muy coincidencial que un puente caido lleve el nombre de mi paisano último presidente de la república, hijo de Popayán ¿o no? Ariari mayo de 2007
He escrito por encargo tantas mentiras: cartas para soldados enamorados, informes para el estado, certificados de cosas que no se hicieron, notas y apreciaciones sobre estudiantes, discursos sobre el optimismo patriotero… he escrito por encargo tantas mentiras, algunas incluso publicadas; he escrito por encargo tantas mentiras y no me avergüenzo, soy un escribano… como el carpintero que talla y pule un mueble horrible a gusto del comprador; por unos pesos yo he pulido palabras horribles y vacías que hoy siguen archivadas… como el albañil, como el aseador, como el recolector, como el ingeniero, como el profesor, como el esclavo, como obrero; he vendido mi palabra por dos pesos y un pan… ¡y no me avergüenzo! (o sí me avergüenzo pero no lo digo en público y me perdono)
4 comentarios:
Pues ya lo acabas de decir!!
Sigue ahora la quemadura de tu propia estrella-negra.
el mas implacable es uno mismo, lo mas terrible es perdonarse
Esa es la ley de este trivial y huaco mundo...fresco mi profe creo que todos hemos escrito o dicho demasiadas mentiras por encargo; es más, esa es ahora la esencia de mi monotonía.
el problema es que yo me volví profesional: me pagan por mentir
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